El término dō (道) proviene originariamente del chino tradicional y en su pronunciación on’yomi se lee como dao o tao. Por si mismo, esta grafía significa «Camino del Universo», siendo parte del dogma central de la religión taoista y budista zen. Su matiz místico y religioso influye apreciablemente en sus aplicaciones en otros términos y dota a las palabras de las que forma parte de un significado común. En español puede traducirse como camino o método de aprendizaje. Esta idea está presente en múltiples disciplinas japonesas y coreanas tradicionales y proporciona a las distintas materias de varios conceptos comunes, que pueden verse reflejados en todas ellas. En la viñeta previa nuestro amigo Santi nos plantea las dificultades de varios estudiantes para asimilar este concepto. Se trata de una idea de difícil concretización y solo cuando el alumno está preparado es capaz de entenderla. El objetivo de este artículo es ofrecer una serie de pinceladas, que abran el apetito al lector para investigar más sobre dō. A continuación enumeramos varias artes japonesas con este sinograma formando parte de su nombre:
- Aikidō (合気道): «Camino de la armonía de la energía vital».
- Judō (柔道): «Camino de la suavidad».
- Kendō (剣道): «Camino de la espada».
- Kyūdō (弓道): «Camino del arco».
- Chadō (茶道): «Camino del té».
- Shodō (書道): «Camino de la escritura».
Históricamente, las disciplinas que incluían las técnicas que hoy forman parte del Aikido Shodokan se encontraban englobadas en un sistema de combate conocido como jūjutsu y, posteriormente, en el daitō-ryū aiki-jūjutsu. Durante el siglo XIX, tiene lugar en Japón la restauración Meiji, en la que sucede una cadena de eventos que provoca la reestructuración política de Japón. En esta época tiene su final el gobierno del shōgun y la recuperación del poder por parte del emperador. Tras esto, tuvo lugar una modernización del país que conllevó la abolición de la figura del samurái con los derechos inherentes que habían tenido. Como consecuencia, los sistemas de guerras (justu) tuvieron que transformarse por necesidad en disciplinas con otro enfoque distinto; así surgieron las artes marciales modernas o dō, que combinan los entrenamientos de lucha con tintes de filosofía en mayor o menos grado. Estos caminos de aprendizaje de artes marciales incluían tradicionalmente una carga filosófica sobre el propio aprendizaje que las diferencia de otras disciplinas.
Tras la II Guerra Mundial, las artes marciales japonesas viajan a Occidente, donde sufren ciertos cambios para adaptarla a la mentalidad del lugar. Un claro ejemplo de ello es la materialización de este camino en forma de grados (kyus/dan), ya que puede ser más complejo adaptar el sistema puro oriental a Europa y América. Este sistema fue introducido por Jigoro Kano al final del siglo XIX con las incorporación de los grados dan y, posteriormente, los grados Kyu. Sin embargo, este sistema es un aspecto de leve relevancia en el camino del Aikido, donde la importancia radica en el aprendizaje y perfeccionamiento día a día (kodawari) de la técnica y de uno mismo, sin una intención de llegar al final de la formación, solo mejorar progresivamente al máximo posible.
Alegorizar el aprendizaje o la vida con un camino es un recurso ampliamente utilizado en las artes, la filosofía e, incluso en las religiones occidentales. El dō es el camino espacial y temporal que se recorre desde el comienzo del aprendizaje. Dura todo el tiempo que se practique una disciplina e incluso puede trascender a esta si se aplican las enseñanzas en otros ámbitos vitales. Se trata de un camino de autoaprendizaje, complementado con las enseñanzas del maestro, que actúa como guía o ejemplo. Sin embargo, es el alumno el que debe descubrir y recorrer el camino. Este viaje es individual y consiste en no tratar «de ser mejor que otros, sino mejor que ayer» (Jigoro Kano). Muchas de las enseñanzas recogidas en las artes marciales pueden ser aplicadas en diferentes entornos y pueden permitir al individuo mejorar en su camino a la plenitud en todos los ámbitos de su vida.
Hane, M. (2011) Breve historia de Japón. España: Grupo Anaya Publicaciones Generales.
Stevens, J. (2002) Secretos del Budo. Fuenlabrada: Luz de Oriente